A pocos kilómetros de Viedma se encuentran El Cóndor y La Lobería, los dos balnearios más conocidos de la región que se caracterizan por su amplitud y la tranquilidad de sus playas que invitan a disfrutar unas vacaciones épicas entre la arena y el mar.
El comienzo del Camino de la Costa
Bordeando la Costa Atlántica por la ruta provincial Nº1 y a tan sólo 20 minutos de Viedma, se encuentra El Cóndor, un pintoresco lugar que cuenta con todos los servicios básicos para pasar una excelente estadía.
Allí, las extensas dimensiones de agua y arena conjugadas con el viento característico de la zona, favorecen la práctica de aventurados deportes como windsurf, kitesurf, sandboard, carrovelismo y kitebuggy, que copan el paisaje con su especial colorido.
Además, existen innumerables propuestas para aquellos que deseen atravesar unas vacaciones tranquilas en familia o con amigos, que incluyen varias opciones gastronómicas en los restaurantes o paradores de playa o actividades deportivas en el Parador de Deporte.
Cielo de aves
La naturaleza y la belleza de las playas, que se extienden a lo largo de 10 kilómetros, hacen de El Cóndor un lugar de ensueño que con el correr de los años no pierde su espíritu acogedor y relajante.
Dueño de características únicas, este sitio alberga la colonia de loros barranqueros más grande del mundo que, sumada a otras 200 fascinantes especies de aves, invitan a realizar aviturismo para conocer a fondo y contemplar la impactante fauna que embellece los cielos de la región.
Mediante el avistaje de aves, servicio ofrecido por lugareños, se promueve el desarrollo y la observación e identificación de aves marítimas, ribereñas y continentales en libertad, con el objetivo de dar paso a la interpretación y comprensión de la dinámica de las diversas especies en su ambiente natural.
Se trata de una actividad programada al aire libre, que implica una caminata tranquila por distintos senderos y que, al ser apta para todo público, maravilla a grandes y chicos por igual.
Paseos históricos
Saliendo del balneario por la ruta Nº1, con dirección a las siguientes playas del Camino de la Costa, se encuentra el Faro Río Negro, el más antiguo de la Patagonia Continental y el más longevo del país en servicio.
Esta edificación, que está elevada sobre el nacimiento de un acantilado y tiene a sus pies la primera y segunda Bajada El Faro, fue declarada Monumento Histórico Provincial en 2007 y posteriormente reconocida como Monumento Histórico Nacional y Patrimonio Histórico de la Humanidad.
Aunque no puede visitarse en su interior, resulta muy interesante contemplar desde afuera esta imponente y majestuosa estructura cilíndrica blanca que tiene una altura sobre el nivel del mar superior a los 45 metros.
Por otra parte, a escasos metros de allí se sitúa el Memorial de Malvinas, un monumento que se erige a orillas del acantilado en memoria de los combatientes que batallaron en el histórico conflicto bélico de 1982 e invita a realizar un paseo reflexivo.
El objetivo de este espacio es que cada visitante pueda meditar sobre el combate ante una insuperable vista al mar argentino y dar paso a las emociones, sintiendo los vacíos del muro que representan a cada uno de los soldados caídos.
Un balneario de Fiesta
Este mes volverá a realizarse la tradicional Fiesta Nacional del Mar y el Acampante, que desde 1973 le rinde tributo con infinidad de expresiones artísticas al principal recurso económico del balneario: el mar.
Entre el 28 y el 30 del primer mes del año artistas de renombre le pondrán ritmo a las noches en el escenario principal. En esta oportunidad las prometedoras jornadas estarán a cargo de Natalie Pérez, Turf y Banda XXI.
La Lobería: una playa diferente
A 30 kilómetros de El Cóndor y 60 de Viedma, La Lobería da inicio al Golfo San Matías con una de las playas más hermosas de la región, resguardada por altos acantilados que recrean un paisaje épico.
Se trata de un lugar con partes de arena y sectores de canto rodado, en el que durante la bajamar quedan al descubierto inmensos piletones naturales de roca que además de ofrecer una postal inigualable, permiten un baño tranquilo y relajante tanto para grandes como para chicos.
La Lobería cuenta con playa de estacionamiento y una confitería que ofrece servicios gastronómicos. Además, recientemente se reinauguró allí el camping municipal que gracias a las mejoras ejecutadas permitirá a los turistas disfrutar servicios de primer nivel.
Fauna imponente
Unos tres kilómetros más adelante de este espacio radica el Área Natural Protegida Punta Bermeja, hábitat permanente de más de 4000 lobos marinos de un pelo, lo que la convierte en la colonia más grande de Sudamérica.
Este lugar tiene como finalidad proteger a estos animales, a los que se suman innumerables especies aves costeras tales como paloma antártica, cormoranes, gaviotas, petreles y loros barranqueros, entre otras.