El autódromo Rosamonte repleto, y una ocupación hotelera del 100%, fueron el testimonio más sólido de lo que significó el TC para la economía local.
El evento deportivo más esperado de la región, disputó su octava fecha en la tierra colorada, y el espectáculo fue más imponente que de costumbre.
La emoción del gran reencuentro del universo fierrero, conspiró para que más de 30 mil fanáticos de todo el país y la región, fueran testigos presenciales de una fiesta que, para muchos, comenzó a montarse el jueves con las primeras carpas, que fueron conquistando los lugares más estratégicos del autódromo de la avenida Juan Manuel Fangio.
Varios fueron los factores que conspiraron para que, la octava fecha del Turismo Carretera -cuyo podio quedó liderado por Benvenutti y secundado por Ledesma y Di Palma- superara todas las expectativas en lo que a números respecta. Un autódromo renovado en infraestructura y seguridad, una ciudad con capacidad para contener un evento de estas características, y políticas sanitarias que siguen demostrando solidez, construyeron la sinergia necesaria para que el deporte y el disfrute ganaran protagonismo este fin de semana.
«El TC volvió con todo su esplendor después de dos años, teniendo en cuenta que el año pasado se hizo con un aforo de no más de 3 mil personas. Para nosotros es un desafío cada vez que vienen a la tierra colorada porque redunda en gasto turístico que es transversal a todos los sectores. Tenemos una ocupación hotelera del 100%, lo que implica trabajo para los bares, restaurantes, supermercados, etc.», destacó el ministro de Turismo, José María Arrúa, quien recorrió el predio desde tempranas horas de la mañana del domingo, junto al gobernador, Oscar Herrera Ahuad; el vicegobernador, Carlos Arce; y el intendente Leonardo Stelatto.
Tanto dentro como fuera del autódromo, la actividad turística fue realmente contundente y, con más de 6 mil arribos y una estadía de 2,6 días para este evento, le dio un guiño de ojos más que positivo al receso invernal, que viene arrojando muy buenos números.
Más de 15 mil pernoctaciones en la ciudad de Posadas, y un movimiento económico que acusó recibo de más de 70 millones de pesos para la capital provincial, demostraron que el turismo está más vivo que nunca y goza de muy buena salud.