Aerolíneas Argentinas presentó, por primera vez, su balance semestral que arrojó como resultado una reducción de las pérdidas del 61% respecto al 2022, el mejor año desde su estatización. El balance, aprobado en el día de hoy por el Directorio de la compañía y auditado por la consultora internacional KPMG, dio un resultado negativo de 48 millones de dólares.
Asimismo, vale destacar que Aerolíneas Argentinas no ha recibido fondos correspondientes al presupuesto asignado para este año. Al día de la fecha, los fondos girados por el Estado Nacional alcanzan los 6 mil millones de pesos, correspondientes al presupuesto de 2022, el que se encuentra en un 70% de ejecución.
Cabe mencionar que si se toma como referencia el resultado de 2019, último año previo a la pandemia, la reducción del déficit supera el 80%, habiendo tenido durante ese año un resultado negativo de 667 millones de dólares.
Los balances semestrales son una práctica que tiene por objetivo mejorar la transparencia, eficiencia y trazabilidad.
“Es un resultado excelente y que, proyectado a un corto ó mediano plazo, indica que vamos camino a la sostenibilidad económica. Hoy tenemos una empresa con niveles mínimos históricos de pérdidas, que vuela a nuevos destinos, con nuevas rutas federales, con más aviones y con récords de pasajeros. Esto demuestra que el crecimiento es la vía adecuada para lograr una Aerolíneas Argentinas económicamente eficiente y con un rol estratégico en la conectividad y el desarrollo del país», explicó Pablo Ceriani, titular de Aerolíneas Argentinas.
En el ámbito operativo, el informe contable destaca la adquisición de 5 aeronaves en los primeros 6 meses de 2023, elevando la flota operativa a 81 aviones. Se espera que, para septiembre, el avión número 82 se sume a la flota. Durante el transcurso de este año, la compañía ya ha transportado a más de 7.7 millones de pasajeros y, según las proyecciones, superará ampliamente la cifra de 12,999,295 pasajeros transportados en 2019.