Durante este mes de noviembre se inaugurará la infraestructura del Corredor Turístico río Manso, una serie de nuevas instalaciones de servicios enmarcadas dentro de un plan integral de desarrollo de la oferta turística de los destinos emergentes rionegrinos.
Se trata de una edificación de 170 m2 de superficie tipo parador. La misma está dotada de un espacio para la gastronomía y otra de exposición o venta de productos regionales, también áreas de servicios como sanitarios accesibles, vestidores y estar (semicubierta).
La obra contempla además, tres miradores construídos en madera, ubicados sobre la Ruta Provincial Nº83, de 21.74 m2 cada uno, tipo deck elevados, equipados con bancos, barandas, escaleras y rampas de acceso. Dos de ellos elevados sobre el nivel de la ruta y uno en cercanías al puesto de gendarmería en la frontera internacional, situados en puntos panorámicos estratégicos dentro del recorrido del área ribereña del Manso.
Por otra parte, estos nuevos puntos suman cartelería interpretativa ilustrada que demarcan los cuatro cerros que rodean al valle (Cerro Montura, Ventisquero, Santa Elena y Grillo) con información sobre cada uno de ellos y con la particularidad que estos datos también están disponibles en alfabeto braille, dando así la posibilidad a las personas ciegas de poder conocer las maravillas que esconden estos picos.
Además, el proyecto incluye la colocación de carteles informativos distribuidos en el recorrido de la ruta totalizando 10, como así también 180 metros lineales de senderos y escaleras de acceso y comunicación entre los distintos puntos del Corredor.
Para conocer dónde queda este pintoresco recorrido en el valle del río Manso, se puede ingresar a su ubicación: https://maps.app.goo.gl/57MVAJ7YH3Hj2shu8.
Esta obra tiene como objetivo posicionar a este destino emergente rionegrino ubicado a 100 kilómetros de Bariloche y 80 de El Bolsón con una obra de infraestructura que impulse la actividad bajo un perfil sustentable y amigable con la prodigiosa naturaleza que rodea el lugar. Cabe destacar que esta obra fue financiada a través de fondos provenientes del Programa 50 Destinos del Gobierno Nacional y la Ley Provincial de Infraestructura Turística Nº 5269.
Esta nueva obra quedará bajo la administración del Comisionado de Fomento de El Manso y posibilitará que la localidad pueda contar con un espacio moderno y totalmente equipado para explotar al máximo el potencial turístico de la zona.
De esta forma, se jerarquizará aún más la actividad turística de la zona mediante puestos de información y servicios, que mejoran significativamente la experiencia que se lleva el turista que visita el Valle y quiere conocer más sobre los atractivos del lugar.
Visitar un destino emergente rodeado de montañas y ríos ¡tiene mucho sentido!
El Manso es un paraje rural que se encuentra en el Valle del Manso, un paraíso escondido a un costado de la legendaria Ruta 40 entre Bariloche y el Bolsón, donde reina el silencio y la cordillera de Los Andes se presenta como un telón de fondo omnipresente y encantador.
El valle atraviesa la periferia del Parque Nacional Nahuel Huapi y en su recorrido se avistan los lagos Mascardi, Los Moscos, Hess y Steffen; los cerros ya nombrados anteriormente, a los que se le suman el General Carreras y el Bastión; como los ríos Manso y Foyel, los cuales se unen a unos 20 Km. antes de que el primero de estos ingrese a Chile por el Paso El León.
Es un sitio ideal para actividades al aire libre y en especial aquellas que tienen a los ríos como protagonistas, con el rafting siendo la principal actividad del lugar, con alternativas que van desde la clase 2 hasta la clase 4 en dificultad debido a las fuertes corrientes de los ríos del lugar, por lo que termina siendo la zona perfecta para que los expertos de este deporte acuático practiquen en recorridos exigentes.
Además, la pesca deportiva también tiene su espacio en El Manso, con una gran actividad en sus modalidades de Mosca y Cuchara, ya que por sus amplias desembocaduras, sus fuertes corrientes y su conexión con los lagos adyacentes, los ríos Manso y Foyel suelen llevar consigo ejemplares únicos de truchas de arroyo, como lo son las arco iris o las marrones.