La Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés celebra la decisión tomada por el Gobierno Nacional y de la Ciudad. A su vez indica que la medida no revierte la crisis del sector, que ya ha generado el cierre de cerca de 1500 comercios del sector. Un local gastronómico alcanza su punto de equilibrio con la explotación promedio del 70% de su capacidad.
La Ciudad de Buenos Aires habilitó los espacios en terrazas y patios de locales gastronómicos en la nueva fase de apertura que comenzará a partir del lunes próximo, previa presentación de un protocolo que deberá ser autorizado por el Gobierno porteño.
La Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés celebra esta decisión tomada por el Gobierno Nacional y de la Ciudad. La entidad había realizado intensas gestiones en ese sentido, planteando la necesidad de los establecimientos de incrementar sus ingresos luego de estar seis meses cerrados. Esta medida se suma a la apertura parcial que se había dado semanas atrás con la habilitación para trabajar en la vía pública. No obstante, estas aperturas no alcanzan para revertir una crisis que ya ha generado el cierre de cerca de 1500 comercios del sector.
Se sabe que la recuperación de nuestra actividad va a tardar en llegar ya que el daño generado por un cierre tan prolongado no será subsanado ni siquiera con la reapertura total. Para que un local gastronómico llegue al punto de equilibrio necesita una explotación promedio de un 70% de su capacidad, por lo que es indispensable que los establecimientos puedan empezar a trabajar dentro de los salones, que es el fuerte de la facturación. Además, es claro que hay locales que no tienen otra posibilidad que atender en su interior ya que no disponen de espacios en las veredas, terrazas, patios o jardines.
Para que este proceso continúe avanzando, es muy importante que tanto los locales como los consumidores respeten estrictamente los protocolos sanitarios por los que tanto se ha trabajado. En este sentido, es fundamental mantener una distancia mínima entre personas de 2 metros como ideal y de 1,5 metros como aceptable, según la indicación del Ministerio de Salud de la Nación. Esta medida aplica tanto para los trabajadores como para el público que asista al establecimiento, así como el uso permanente del cubrebocas, que sólo está permitido sacárselo para el momento del consumo.
La AHRCC convoca, tanto a los empresarios como a los clientes, a extremar las medidas de prevención para poder continuar disfrutando de un café, una cerveza o una comida en un restaurante o en un bar. Al mismo tiempo, se continuarán realizando las gestiones pertinentes ante las autoridades para poder avanzar en mayores flexibilizaciones.
Asimismo, teniendo en cuenta la grave situación se continuará reclamando las medidas de asistencia indispensables para la supervivencia de los establecimientos y sus fuentes de trabajo.
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