«La Ley de Emergencia Turística para la provincia es un reclamo justo del sector, que sin dudas es de lo más afectados por esta pandemia», dijo el gobernador Jorge Capitanich.
El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, aseguró hoy que analiza decretar la Emergencia Turística provincial y se mostró a favor del Proyecto de Recuperación del Turismo que impulsa Nación «porque crea un marco de fondo adecuado para ayudar al sector frente a la crisis provocada por el coronavirus».
Capitanich, quien participó en una reunión con las Cámaras que agrupan a los dirigentes del sector, manifestó en declaraciones a Sentí Argentina de AM Con Vos que «la Ley de Emergencia Turística para la provincia es un reclamo justo del sector, que sin dudas es de lo más afectados por esta pandemia».
El gobernador de Chaco adelantó que, en el marco de la iniciativa provincial, «hay varios puntos que permiten generar fondos para estimular al sector» y, entre ellos, destacó «los que provendrán de un porcentaje de Ingresos Brutos».
«También estamos desarrollando un registro digital para identificar a los prestadores que necesitan la ayuda del Gobierno provincial porque no calificaron para los ATP, el IFE o los créditos a tasa cero y así poder asistirlos rápidamente», precisó el mandatario provincial.
Además, reveló que la provincia trabaja junto a intendentes en el desarrollo de «un plan en tres fases de 45 días, con el objetivo de ver cuáles son las condiciones sanitarias para la vuelta de la actividad turística a nivel local».
En este sentido, precisó que de ese rubro depende «el trabajo de unas 1.200 personas y 67 establecimientos rurales familiares dedicados a recibir turistas».
Por su parte, la presidenta de la Asociación de Hoteles, Bares y Restaurantes de Chaco, Verónica Mazzarolli, sostuvo tras el encuentro que «la reunión fue muy buena» dada la coincidencia en la necesidad de una Ley de Emergencia Turística provincial.
«Contamos con muy buenos protocolos de bioseguridad y estamos en condiciones de volver a la actividad, algo que es urgente porque muchos establecimientos están al borde del cierre definitivo», enfatizó Mazzarolli.