En Francia se discute una sola dosis para los ya infectados mientras que autoridades internacionales afirman que el «coronavirus se adapta muy bien al ser humano» y llegó para quedarse.
La carrera que el mundo libra contra el coronavirus para concretar mayor número de vacunaciones parece ya no respetar reglas ni estrategias sanitarias, por cuanto la demora en la producción de los antídotos ha impulsado a varias naciones a buscar soluciones temporarias para frenar la pandemia, que ya ha causado casi 108 millones de contagios y se acerca a los 2,4 millones de muertes.
Las autoridades sanitarias francesas, por ejemplo, aconsejaron hoy aplicar «una sola dosis» de la vacuna a las personas que ya tuvieron la enfermedad, convirtiéndose en el primer país que formula esta recomendación.
Los pacientes que tuvieron Covid-19 «desarrollaron una memoria inmunológica tras la infección. La dosis única de la vacuna desempeñará así un papel recordatorio», explicó la Alta Autoridad de Salud francesa (HAS), en una recomendación que todavía no recibió el aval del Gobierno.
La HAS recomienda también que la inyección sea entre los tres y los seis meses posteriores a haber tenido Covid-19.
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió «más estudios» para validar esta solución y mantuvo su recomendación de que se utilicen dos dosis, también en aquellas personas que ya han superado la infección.
La científica jefe de la OMS Soumya Swaminathan opinó que la estrategia francesa necesita más evidencia científica para ser respaldada.
«Se necesitan más estudios y más seguimiento para, basándonos en la ciencia hasta el momento, hacer este tipo de recomendaciones. Nuestra guía sigue indicando que se utilicen las dos dosis», contestó a preguntas de los medios de comunicación en la rueda de prensa de la OMS este viernes desde Ginebra, Suiza, informó la agencia de noticias Europa Press.
Además, lejos de cualquier mensaje alentador, la directora de la agencia europea encargada de enfermedades, Andrea Ammon, aseguró hoy que «el mundo debe ser consciente de que la Covid-19 se quedará entre nosotros«.
«Ahora parece más probable que se quede» a que desaparezca, declaró Ammon, directora del Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés), en una entrevista con la agencia de noticias AFP.
«Parece que se ha adaptado muy bien a los humanos. Así que debemos prepararnos para que se quede entre nosotros», agregó.
Las nuevas cepas
La aparición de mutaciones del virus transformadas en nuevas cepas de la infección sigue despertando alarma en las autoridades sanitarias y en los laboratorios, que vienen redoblando esfuerzos en la producción de ampollas a pesar de que algunas de sus fórmulas tal vez no puedan neutralizar estas nuevas variantes.
La OMS intentó hoy restar tensión sobre este tema y afirmó que sabe de casos de reinfección con nuevas cepas del coronavirus, pese a la presencia de anticuerpos contra el virus contraídos en el primer contagio, declaró la científica Swaminathan.
«Recibimos informaciones sobre la reinfección con la nueva cepa del virus; hubo datos preliminares de Sudáfrica que sugieren que las personas contagiadas pueden volver a infectarse«, dijo Swaminathan ante la prensa, citó la agencia de noticias Sputnik.
Señaló que los científicos investigan el grado de inmunidad contra el coronavirus de las personas que ya lo superaron, y al mismo tiempo dejó constancia de que, de acuerdo con datos preliminares, la vacunación reduce la virulencia del virus y su transmisión.
El 19 de diciembre, las autoridades sanitarias del Reino Unido confirmaron la presencia en el sur del territorio británico de una nueva cepa del SARS-CoV-2 que se propaga con más rapidez y, según las estimaciones iniciales, podría ser un 70 por ciento más contagiosa, si bien no hay evidencias de que esta mutación repercuta en la gravedad de los síntomas, la tasa de letalidad, la respuesta de los anticuerpos o la eficacia de las vacunas. Otra cepa del coronavirus se registró en Sudáfrica y otra en Brasil.
Mientras tanto, en todo el mundo los países siguen sufriendo las consecuencias de la pandemia y ordenando y levantando restricciones y otras medidas, en un intento por paliar las negativas consecuencias económicas que la enfermedad viene provocando desde hace más de un año en todo el planeta.
En la región se advierte un sostenido descenso de casos y consecuentemente de muertes, aunque la escasa o nula posibilidad de vacunación masiva a las poblaciones hacen temer una segunda ola para abril o mayo, según todas las previsiones.
En Chile, el presidente Sebastián Piñera recibió hoy la vacuna CoronaVac, del laboratorio chino Sinovac.
Al mandatario, de 71 años, le correspondía inocularse esta jornada según el calendario de vacunación dispuesto por el Ejecutivo, debido a que integra el grupo de riesgo de los adultos mayores, que tienen prioridad.
Y en Europa, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo que el objetivo de la Unión Europea (UE) es vacunar al 70% de la población adulta para el 21 de septiembre, fecha en que finaliza el verano en el hemisferio norte.
«Tenemos el objetivo común en la UE de vacunar al 70% de la población adulta para el final del verano. Es una fecha que está muy clara», explicó Von del Leyen.
Por otra parte, Hungría se convirtió hoy en el primer país de la Unión Europea en aplicar la vacuna Sputnik V, de elaboración rusa, que ya cuenta con registro en 27 países luego de ser incorporada en las últimas horas por Montenegro, San Vicente y las Granadinas y Kazajstán.
Fuente: Télam