Parques Nacionales, como organismo integrante del Comité Argentino de Patrimonio Mundial, fue uno de los actores protagónicos en este proceso a través de la participación de profesionales que aportaron al intercambio y la fundamentación técnica para la postulación del sitio.

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Durante la 45ª reunión del Comité Intergubernamental de Patrimonio Mundial celebrada hoy en Riad, Arabia Saudita, se aprobó la inscripción del Museo Sitio de Memoria ESMA Ex Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio en la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO.

Museo Sitio de Memoria ESMA, designado Patrimonio Mundial por la UNESCO
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La inclusión del bien en la lista se fundamenta en el criterio VI de la Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural de 1972, que refiere a “estar directa o materialmente asociado con acontecimientos o tradiciones vivas, ideas, creencias u obras artísticas y literarias que tengan una importancia universal excepcional”.

En 2015 se inició el proceso para incluir al Museo en la Lista Tentativa Nacional. Este se hizo efectivo en 2017 por decisión del Comité Argentino del Patrimonio Mundial, presidido por la Comisión Nacional Argentina de Cooperación con la UNESCO.

Museo Sitio de Memoria ESMA, designado Patrimonio Mundial por la UNESCO
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En este sentido, la Administración de Parques Nacionales, como organismo integrante del Comité Argentino de Patrimonio Mundial, fue uno de los actores protagónicos en este proceso a través de la participación de profesionales de su Dirección Nacional de Conservación, quienes aportaron durante todo el proceso a la revisión del dossier de nominación, participaron de diversas reuniones de trabajo que acompañaron la formulación de la propuesta y realizaron contribuciones para adecuar los criterios de inscripción que dan fundamento técnico a la postulación del sitio en el marco de la Convención.

El Museo Sitio de Memoria ESMA es testimonio material y físico de las violaciones a los Derechos Humanos ocurridas durante la última dictadura cívico-militar y funciona como denuncia, prueba y evidencia de los actos de terrorismo perpetrados por las fuerzas armadas argentinas entre 1976 y 1983. En el caso del Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio de la ESMA, tanto su materialidad (el edificio) como su dimensión inmaterial (la lucha de los movimientos de Derechos Humanos) y la recuperación de este sitio como espacio para rememorar la historia posibilitan la comunicación de la