El turismo es necesario en un país como la Argentina donde la generación de puestos de trabajo es un problema central a resolver, es esta actividad la que se presenta como una herramienta generadora de oportunidades que debe potenciarse con el acompañamiento de políticas públicas que amplíen sus efectos positivos.
En este contexto y en razón de las declaraciones vertidas por Eugenia Rolón, referente de Comunicación y Redes de La Libertad Avanza, sobre el rol inexistente que tendrá el turismo en el caso de que Javier Milei llegue a la presidencia, es preciso señalar que estas consideraciones reflejan un desconocimiento preocupante sobre el funcionamiento de la industria donde la sinergia pública – privada juega un rol fundamental para que Argentina sea líder, quizá, en la única actividad económica donde hay continuidad de políticas públicas.
El Norte argentino es una de las regiones que, en la industria turística, más crecimiento sostenido tiene en varios indicadores, esto no sería posible sin la asociación pública – privada. Un Estado presente, puesto a brindar herramientas para que el sector privado crezca y potencie así sus efectos de inclusión económica.
Rolón define la inversión pública en el turismo como un gasto, que ese gasto es causante de “chicos con hambre”. Es una negación grosera de parte de un sector político que tiene intenciones de conducir este país. El turismo no solo genera miles y miles de empleo genuinos, es la actividad económica más transversal de la que viven empresarios, emprendedores de todas las escalas y miles de familias que no forman parte directamente de la actividad.
A pesar de que Argentina desde sus orígenes pregonó el concepto de federalismo para la construcción de nuestros cimientos como Nación, estas declaraciones muestran que aún existen esas miradas centralistas que obstaculizan un camino de desarrollo integral.
Desde el Norte argentino invitamos a una reflexión. ¿Qué hubiese sido de nuestro sector en la pandemia sin un estado presente? ¿Qué sería de los destinos en temporada baja sin PreViaje? ¿Qué sería de muchos municipios de Argentina sin el programa 50 Destinos? ¿Qué sería de los destinos que necesitan la promoción internacional sin un estado que acompañe en las ferias generando más oportunidades y empleo? ¿Qué sería la actividad sin las acciones de promoción que potencia el turismo que en las provincias del Norte puede significar el 10% del PBI? Estas son solo algunas de las reflexiones que como sector y sociedad deberíamos tener presente.