El trabajo elaborado por el Laboratorio Estadístico del organismo aporta información de diversas variables vitícolas: hectáreas cultivadas, variedades, año de plantación, sistema de conducción, cantidad de viñedos, aptitud de la uva, color, agrupamiento de las variedades en la parcela, con tendencias y variaciones de estos datos a lo largo del tiempo.
El presidente del INV, Martín Hinojosa, destacó la importancia del informe porque proporciona una gran cantidad de datos que son fundamentales para la vitivinicultura nacional. Además, analizó algunas cifras remarcando que “hay una reconversión hacia las variedades tintas, en donde encuentra su lugar la Malbec como la que más crece en el país y se observa una disminución en las criollas rosadas y blancas”.
En cuanto a la diversificación de la actividad, Hinojosa remarcó que “a partir de los datos se corrobora el aumento de las variedades aptas para consumo en fresco y/o pasas, con Flame Seedless y Fiesta a la cabeza, las cuales se encuentran entre las variedades que más crecen desde 2010”.
Con respecto a la actividad vitivinícola, el Presidente del INV estimó que “se destaca que continúa creciendo en 15 de las 18 provincias vitivinícolas, las cuales han aumentado sus hectáreas cultivadas desde 2010 junto al desarrollo del enoturismo, a través de los Caminos del Vino y distintas propuestas para los visitantes nacionales y extranjeros”.
Datos por provincias
De los datos analizados surge la disminución de superficie en las provincias de Mendoza (-3,4%) y San Juan (-7,7%) causados por una reconversión de negocios (ligados a cambios varietales y productividad), en un contexto de cambio climático y disponibilidad hídrica.
El informe muestra que Salta lidera el ranking de provincias con mayor crecimiento, aumentando 1.056 ha (+41,4%) desde 2010 (año del último censo vitícola). Neuquén es la provincia con viñedos más grandes, llegando a 18,4 ha el tamaño medio del viñedo (tmv). Catamarca sigue siendo la provincia con propiedades más pequeñas, tmv 2,1 ha.
Sobre la superficie cultivada a nivel nacional, Hinojosa destacó que “en el último año se han incorporado a la vitivinicultura, algunos departamentos de distintas provincias argentinas como Malargüe en Mendoza, Río Cuarto en Córdoba, San Nicolás y Campana en Buenos Aires, Escalante y Biedma en Chubut y Rosario en Santa Fe”.
Otro aspecto importante es que “la tendencia que se aprecia, analizando los datos de este anuario, es que el 72% de la superficie de variedades aptas para elaboración en el país se consideran de alta calidad para la obtención de vinos con denominación de origen, Reserva y Gran Reserva” concluyó Hinojosa
Toda la información detallada a nivel nacional, por provincia y por departamento, se puede consultar en el informe completo disponible en el siguiente LINK.