“En esta etapa queremos que se puedan seguir realizando actividades comerciales para no perjudicar el bolsillo de la gente, ni el trabajo, pero insistimos en evitar la circulación de personas, además de las reuniones sociales, para que no haya contagios”, dijo el gobernador Bordet.
El primer mandatario provincial afirmó que, atento al número de casos Covid 19 registrados en la provincia, “el cuadro es crítico pero está bajo control”.
Además, comentó que “nuestra cercanía geográfica con el AMBA, donde está concentrado el 95 por ciento de las casos en el país, necesariamente representa una amenaza y los contagios que se han presentado en los últimos tiempos fueron por contactos de personas que fueron y volvieron, algunas por asistencia médica, otras por trabajo, otras que fueron a vender productos, actividades todas permitidas».
«En un principio esta situación se controlaba fácilmente por el hecho del aislamiento estricto, ya que cuando venía una persona de AMBA con el virus contagiaba a su grupo familiar solamente, dos o tres personas. Sucedió que después, cuando empezamos a habilitar comercios, reuniones familiares, muchos intendentes empezaron a tomar medidas por su cuenta que contradecían claramente lo que establecía el DNU, como la habilitación de reuniones sociales o cultos religiosos como ocurrió en una ciudad hasta 60 personas, y esto provocó que se naturalice una situación que no estaba permitida, que era la de las reuniones sociales», dijo el mandatario y subrayó que los contagios en esos espacios, «hizo que la curva aumente exponencialmente».
Luego sostuvo que en «esta etapa queremos que se puedan seguir realizando actividades comerciales para no perjudicar el bolsillo de la gente, ni el trabajo de las personas, pero evitar las reuniones sociales porque es allí donde se produjo la mayor cantidad de contagios».
Consultado sobre el número de ocupación de camas de terapia intensiva en la provincia, respondió que alcanza «al 28 por ciento pero por Covid hay una sola en Concordia».
Finalmente, Bordet destacó la importancia de los controles en los accesos a las ciudades y también dijo que la pandemia permitió «poner a punto el sistema sanitario. En 15 días tomamos posesión del hospital De la Baxada, que era de PAMI y por eso no podíamos intervenir, pero la emergencia nos permitió entrar, desempolvar 30 respiradores que hacía cuatro años que estaban embalados y sin utilizar, habilitar 20 camas de terapia intensiva y 60 para internación intermedia, y en general en la provincia duplicamos la cantidad de camas de terapia intensiva y de respiradores».