El resultado electoral del último domingo más allá del análisis puntual, deja mensajes muy definidos: poca participación del electorado, una inclinación significativa hacia los sectores de extrema derecha e izquierda y la fuerte caída del oficialismo, sobre todo en los destinos turísticos.
La pregunta que muchos se hacen es que llevó a la población a volver a elegir a los que durante cuatro años hicieron caer el salario, aumentaron de manera escandalosa impuestos y tarifas, endeudaron al país como nunca antes, dejaron caer la industria y aniquilaron a las Pymes, y el sector turístico comenzó su debacle aun sin pandemia?
La respuesta a ese interrogante requiere un profundo análisis, pero si tenemos que resumirlo en una palabra sería: Comunicación. Hay que saber comunicar, están los que siguen a carro y caballo y los que gastan millones en ver de que manera pueden manipular el cerebro humano a través de minuciosos trabajos de comunicación. Ello permite convencer a una persona que con un empleo determinado no tiene derecho a tener ciertos beneficios, como viajar o vacacionar por ejemplo; y hasta defender un abusivo aumento de tarifas en favor de los mas poderosos. Eso y mucho mas hace posible un mensaje certero.
Vayamos al grano; la temporada de verano de 2020 fue la mejor de los últimos cinco años, los segmentos hoteleros que más crecieron en ocupación fueron los de una y dos estrellas según datos oficiales, que significa eso? que el humor social había cambiado con la llegada de Alberto Fernández a la presidencia, y el que tuvo un «manguito» se lo gastó en vacaciones, sabiendo que su disfrute ya no se lo llevarían el aumento de las tarifas y las grandes corporaciones.
Pero llegó la pandemia y todo cambió, el mundo cambió. Y pasamos a tener la «cuarentena mas larga del mundo» y «caranchearon» con los muertos, pero el gobierno no supo desmentirlo ni demostrar que en otros países líderes mundiales, los muertos por la pandemia quedaron días en sus casas porque no había donde ponerlos, se ampliaban cementerios, había enfermos tirados por los pasillos hospitalarios y fallecían sin atención médica; en España habilitaron el Palacio del Hielo (un lugar de diversión) para transformarlo en una gigantesca morgue y Nueva York mostraba imágenes desgarradoras. Pero muchos funcionarios del gobierno vivían en su mundo de fantasía, mientras el resto de los argentinos se creía que éramos los peores del mundo. En sintonía, las potencias económicas también cerraron meses, abrían y volvían a cerrar.
Ese «Diario de Yrigoyen» hizo explotar a Cristina, primero puertas adentro y luego con una carta como la que hizo pública ayer. Está claro que un presidente no puede «patear» la calle como el resto de los mortales, y debe confiar en sus funcionarios, pero si estos viven en un planeta distinto, la realidad que recibe el Presidente es otra y se entera de que algo no está bien cuando llega la hora de votar y se recibe un golpe certero «al mentón», como fue el resultado de las PASO 2021.
Al respecto la ex presidenta escribió: «A propósito de la categoría de funcionarios que no funcionan… el vocero presidencial (Juan Pablo Biondi) escaparía a aquella clasificación. Es un raro caso: un vocero presidencial al que nadie le conoce la voz. ¿O tiene alguna otra función que desconocemos? ¿La de hacer operaciones en off por ejemplo? Verdadero misterio».
«Sin embargo ahora, al día siguiente de semejante catástrofe política, uno escuchaba a algunos funcionarios y parecía que en este país no había pasado nada, fingiendo normalidad y, sobre todo, atornillándose a los sillones. ¿En serio creen que no es necesario, después de semejante derrota, presentar públicamente las renuncias y que se sepa la actitud de los funcionarios y funcionarias de facilitarle al Presidente la reorganización de su gobierno?» – Escribió la Vicepresidenta en su carta, completando en un párrafo siguiente: «El martes 14 tuvo lugar, otra vez en Olivos, mi última reunión con el Presidente de la Nación. Habían transcurrido 48hs sin que se comunicara conmigo y me pareció prudente llamarlo y decirle que tenía que hablar con él. Deje pasar 48hs deliberadamente, para ver si llamaba (debo decir que de las 19 reuniones, la mayoría fueron a iniciativa mía)».
Por que mencionamos esto? porque en una de esas reuniones, antes de Semana Santa, Cristina le advirtió a Alberto sobre la crisis que vive el sector turístico, los mas de un millón doscientos mil puestos de trabajo que están en riesgo, pero el presidente dijo «yo tengo otros datos».
Pero ella insistió y le mostró un documento que había sido confeccionado por el sector privado, por región, provincia y municipio, se había filtrado y se lo hicieron llegar; nunca se publicó porque las cifras eran catastróficas y la idea era tener el estado de situación. Quienes encargaron ese estudio no quisieron confrontar directamente con el ministro Lammens y por eso no trascendió.
«Estos son los datos reales Alberto», aseguran que le dijo al Presidente que obviamente manejaba otros números.
El 13 de Julio de este año la secretaria de Promoción Turística, Yanina Martínez, muy activa en todas las redes sociales, compartió en su cuenta de Instagram personal, una foto junto a Alberto Fernández con el siguiente texto: «Esta tarde me reuní con el presidente para conversar sobre distintos programas turísticos que estamos impulsando desde @turdepar. La campaña de vacunación más grande de la historia avanza y nos permite proyectar pensando en una nueva normalidad. No tenemos dudas sobre el papel fundamental que tiene el #Turismo para la #Argentina, un verdadero motor de la reactivación económica. Trabajamos desde el Estado Nacional en ese sentido, con eje en el federalismo, la inclusión, la unidad y la perspectiva de género»- decía la funcionaria quien en varias oportunidades destacó que durante el último verano y en pandemia habían viajado por Argentina más de 13 millones de personas.
«En una campaña que como nunca se puso como agenda la crisis del turismo, tenemos un Ministerio autista y ustedes son cómplices porque no lo dicen» le dijo un intendente muy alterado al director de Turismo530 en un llamado telefónico el lunes por la mañana.
Los números no mienten y no es casual que en determinados distritos donde el turismo ocupa un lugar preponderante en la economía la derrota haya sido tan marcada, como por ejemplo en el Partido de La Costa, un bastión peronista en el que oficialismo perdió por más de 13 puntos.
Cabe recordar que desde el Senado Cristina avanzó en 2020 con la Ley de Sostenimiento y Reactivación Productiva de la Actividad Turística Nacional, que fue aprobada por unanimidad y que contemplaba importantes ayudas al sector pero que el Ejecutivo Nacional empezó a reglamentar de manera parcial en octubre y que dejó caer el 30 de diciembre, sin hacer uso de la facultad de prorrogarla por ciento ochenta días que podía haber dado continuidad con la firma del Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
Nadie puede negar la voluntad del primer mandatario, y hasta su sensibilidad para lo que menos tienen: congelar tarifas, aumentar salarios y jubilaciones, el fortalecimiento del sistema de salud; la aplicación de mas de 60 millones de dosis de vacunas contra Covid-19, posicionando a nuestro país entre los mas vacunados. Pero esto no es fútbol que te podes cargar el equipo al hombro; en un gobierno si el equipo fracasa se cae todo a pedazos y no hay un técnico para despedir, hay que cambiar a los jugadores.
Argentina está entre los países que mayores medidas de asistencia efectuó en épocas de pandemia, y nadie lo sabe ni lo dice, obviamente que nada es suficiente ante la crisis. Es necesario siempre, saber leer entre líneas los mensajes y los discursos, algunos mas directos que otros. La vicepresidenta en el cierre de campaña fue contundente: «Tenemos que seguir asistiendo a sectores como el turismo, no lo dejemos caer». Esa es la realidad.