El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, que lidera Juan Cabandié, determinó ratificar el cierre del zoológico de Luján y avanzar en su clausura preventiva total por no acreditar un plan de reconversión; por sus sostenidos incumplimientos en materia de la normativa vigente, en los órdenes nacional y provincial, que rige el funcionamiento del establecimiento; y en función de irregularidades detectadas dentro del predio, en el marco de procedimientos de fiscalización que llevó adelante la Secretaría de Control y Monitoreo Ambiental, a cargo de Sergio Federovisky. Por otro lado, se intimó a la institución a regularizar su situación en un plazo improrrogable de diez días.
“El Ministerio de Ambiente considera que, en función de no haber llevado a cabo el proceso de reconversión que se le indicó en el mes de febrero, se procede al cierre del zoológico, dado que tampoco está cumpliendo con la marcación y la colocación de chips para la adecuada identificación de su plantel faunístico”, afirmó Federovisky. Y agregó que “lo que estamos haciendo es garantizar que un zoológico que no responde a la normativa vigente, ni a la ética que la propia sociedad reclama, se reconvierta y no siga explotando la peor faceta de la exhibición y el contacto con los animales”.
La medida se implementó a través de una resolución ministerial, habida cuenta que transcurrió un lapso de diez días, establecido por una previa intimación que cursó la cartera ambiental nacional al establecimiento para que regularice su situación, sin que este haya dado una respuesta positiva.
A fines de agosto, el Ministerio de Ambiente nacional decidió que el zoológico de Luján no retomaría sus funciones tras la extinción del aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia por COVID-19, vigente en el distrito en el cual se encuentra asentado, por carecer de una habilitación nacional y provincial, además de las citadas irregularidades sobre el manejo de fauna silvestre.
A mediados de febrero del corriente, funcionarios de la cartera ambiental nacional, del área de Protección Animal de la Defensoría de la provincia de Buenos Aires, autoridades municipales y representantes del establecimiento en cuestión, participaron de una reunión donde se delimitaron los lineamientos para que el zoológico de Luján avanzara en un procedimiento de reconversión. Específicamente, se definió el desarrollo de un documento con estándares de cumplimiento obligatorio y medidas inminentes para comenzar ese proceso o solicitar su cierre definitivo, en caso de no registrarse cambios.
Cabe recordar que pocos días después, el Ministerio a cargo de Juan Cabandié, junto con la Municipalidad de Luján y la Policía Ecológica bonaerense, fiscalizó el establecimiento y clausuró jaulas de leones, tigres, elefantes y guacamayos, por permitir el contacto de los visitantes con los animales, lo que está prohibido por la legislación provincial que regula en la materia.