«Estamos ante un gran proyecto de ingeniería que va a revalorizar uno de los símbolos porteños», dijo el Jefe de Gobierno, Jorge Macri, quien supervisó los trabajos en el monumento.
En poco tiempo miles de personas van a poder llegar hasta las cuatro ventanas de la punta del Obelisco, a 62 metros de altura, para disfrutar de una vista imperdible. Será el mirador panorámico más importante de la Ciudad y ya están instalando la estructura metálica del ascensor.
«Estamos ante un gran proyecto de ingeniería que va a revalorizar uno de los símbolos porteños, el mirador panorámico va a ser un nuevo atractivo turístico que va a cambiar la manera de ver nuestra Ciudad y su patrimonio, como en las grandes metrópolis del mundo», dijo Jorge Macri esta mañana al supervisar las obras junto al ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, Ignacio Baistrocchi.
Desde julio un grupo de ingenieros, arquitectos, especialistas en seguridad y operarios técnicos llevan adelante el plan de obra, cuyo plazo aproximado de ejecución es de ocho meses. Los trabajos comprenden una superficie de 160 metros cuadrados entre la base, las cuatro columnas metálicas que contienen las guías del ascensor, la escalera de emergencia y el mirador.
El ascensor llegará hasta los 55 metros de altura. Luego los visitantes podrán subir al mirador a través de una escalera caracol de 35 escalones. Será para cuatro personas y tendrá tres caras vidriadas.
Hasta ahora solo se podía subir a la cúspide por siete tramos de escalera marinera con 206 escalones en total. El ascenso se hacía con casco, guantes de amianto, arneses y la asistencia de personal de Defensa Civil.
«Vamos a potenciar el atractivo turístico que ya tiene el Obelisco. La Ciudad tiene más de 2.400 monumentos y obras de arte, es un museo a cielo abierto; vamos a seguir trabajando todos los días para mantenerlos y mejorar la experiencia de los vecinos y turistas”, sostuvo el ministro Baistrocchi.
El Obelisco es un Monumento Histórico Nacional, por lo que se debe resguardar y preservar su estructura; y todo lo que se instale debe ser reversible. Como la obra no afecta las fachadas ni la cúspide del monumento, fue aprobada por la Comisión Nacional de Monumentos.
La coordinación de la propuesta turística del lugar estará a cargo del Ente de Turismo de la Ciudad. La creación del Mirador Obelisco, así como la reciente reapertura de la Torre Monumental -que también ofrece una vista panorámica privilegiada en el barrio de Retiro-, desarrollará nuevos circuitos y recorridos en la agenda turística porteña.
El Obelisco fue creado por el arquitecto Alberto Prebisch y se inauguró el 23 de mayo de 1936 para celebrar los 400 años de la primera fundación de Buenos Aires. Fue levantado en la Plaza de la República en tiempo récord, apenas 31 días, y en la obra trabajaron 157 operarios. Mide 67,5 metros de altura y tiene una base de 6,8 metros por lado.
Su construcción fue parte de un plan de modernización de la Ciudad que incluyó el ensanchamiento de la avenida Corrientes y la apertura de la Avenida 9 de Julio.