El dirigente empresario español y argentino por adopción, dueño del Bar Notable porteño La Biela, fue protagonista del Vivo de Instagram, presentado por Daniel Prieto. En este espacio, dijo que el empresario hotelero y gastronómico va a tener que seguir agudizando el ingenio para salvar a las empresas: “Pasé varias crisis, pero ninguna como ésta”.
El Ciclo de Charlas por Instagram Live “Entre Colegas” de FEHGRA, creado para estar en contacto directo con dirigentes y empresarios hoteleros y gastronómicos de todo el país en esta etapa impactada por la pandemia, sumó al dirigente empresario Carlos Gutiérrez García, quién habló de su establecimiento, La Biela, Bar Notable de la Ciudad de Buenos Aires, lugar icónico de la Recoleta porteña, marca registrada y reconocido internacionalmente. El lunes 21 de septiembre, Daniel Prieto, coordinador de la Región CABA de FEHGRA, fue el encargado de entrevistar al ex presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (AHRCC) de Capital Federal y Consejero de FEHGRA.
El inicio y los clientes ilustres
En este marco, el empresario contó la historia que lo une a La Biela desde hace más de 50 años, con anécdotas y conceptos que amenizaron la hora del encuentro. La charla comenzó haciendo referencia sobre por qué se llama La Biela. Resulta que el playboy y corredor de autos Roberto “Bitito” Mieres y sus amigos fundieron la biela de su auto muy cerca del establecimiento. Cuando entraron al bar, se lo contaron al mozo que lo atendió. A partir de ese día de 1950, el grupo de automovilistas empezó a reunirse en el pequeño establecimiento al que bautizaron “La Biela Fundida” primero, y luego sencillamente “La Biela”. Carlos Gutiérrez llegó al negocio en septiembre 1966, poco después de arribar al país desde su España natal: “Llegué un año antes y empecé a trabajar en una confitería de un tío -a pocas cuadras-. Un tiempo después nos hicimos cargo de La Biela. Empecé en el salón, estuve en la barra, donde había barmans muy buenos y reconocidos. Hice el curso con referentes de esa época, entre quienes se encontraba Manolete, tengo el carnet de barban profesional”. Daniel Prieto, también empresario gastronómico, destacó la importancia del barman mencionado, reconocido internacionalmente: “Tenía mucha conducta, era exigente, además de esmerarse en los tragos que armaban, se fijaban en la mise en place. Para mi fue importante, por ellos participé en varios torneos internacionales en Harrods. No gané ninguno, pero anduve bastante bien”, sonríe. Explicó que al tiempo compraron los locales de ambos costados y en mayo del 67 abrieron el restaurante. Fue una época de oro para el lugar: “Todos los martes venían a comer los artistas del Teatro Colón”. Y la mención fue el pie para que mencioné a muchos de las personalidades que tuvieron en La Biela su punto de encuentro, como Mirta Legrand, Susana Gimenez, Julio Iglesias, Alain Delon, al bailarín Rudolf Nureyev, Joan Manuel Serrat, Raphael, Joaquín Sabina. Y pilotos de Fórmula 1, como Jackie Stewart, Nikki Lauda, Emerson Fittipaldi, además de Fangio, Gálvez, José Froilán González y Carlos Reutemann. Facundo Cabral pidió que su cortejo fúnebre tenga una parada en La Biela. Dijo: “Yo mismo atendí al Rey Felipe de España”. Y también al escritor Adolfo Bioy Casares: “Era muy amable, siempre estaba de buen humor. En uno de sus libros habla del personal de La Biela. Se sentaba con Jorge Luis Borges, escribieron libros acá. en la Mesa 20”. La Biela rindió homenaje a sus clientes más ilustres que fueron habitués del lugar, colocando sus estatuas. La Mesa 20 sigue estando ocupada por Bioy, de traje y con un libro abierto entre sus manos, junto a su amigo Borges, y en el ingreso da la bienvenida Oscar “Aguilucho” Gálvez, prócer del automovilismo. Otro tesoro de La Biela son los cuadros y objetos que cuelgan de sus paredes, entre ellos la última foto que le tomó Aldo Sessa a Juan Manuel Fangio y la biela que le dio nombre al histórico bar del barrio de Recoleta. Daniel Prieto agrega: “Los clientes sienten a La Biela como algo propio, pasó a ser un lugar de Buenos Aires, porque se lo toma como un punto de encuentro, con mucha mística”.
Tres ejes: Evolución, calidad y personal
Carlos Gutiérrez explicó como la clientela fue mutando: “En esos tiempos teníamos como clientes a las familias tradicionales de la ciudad. Cuando se empezaron a abrir los countries, cambió todo, pero empezaron a llegar los turistas”. Hasta antes de la pandemia tenían un 50% de clientes a los turistas, en su mayoría brasileños, pero también muchos europeos. Daniel Prieto completa: “Es importante la evolución del negocio, se fueron adaptando, y creciendo en función al público. No sé si hay muchos locales en Buenos Aires que han podido adaptarse a los distintos públicos. Tal vez, el Tortoni”.
Además del exquisito café, uno de los secretos de La Biela es que tiene muy buena cocina: “Cuidamos mucho la calidad del producto. A pesar de las crisis, la calidad no se toca y las porciones tampoco. Ni en pandemia, ni antes ni después. El jefe de cocina hace 40 años que está conmigo, se jubiló y sigue con nosotros. La mayoría del equipo se hizo acá. El costo no es el mismo que cuando tenés personal nuevo, pero hay ventajas importantes. Todos mis mozos conocen a la gente que viene por sus nombres. Y eso no se da en todos lados. Es una satisfacción para el cliente, por eso, en muchos casos La Biela es como una continuidad del hogar en Recoleta”.
El dirigente
Hace 40 años Carlos Gutiérrez empezó a trabajar en la Cámara de Bares de la AHRCC: “Era una estructura más chica. La primera pelea que tuve fue renovarla. Cuando ocupé el cargo de Presidente fue, creo, cuando más socios se hicieron. Realizamos un trabajo importante en los barrios. Siempre participé en FEHGRA, en el Consejo Directivo”. Daniel Prieto destaca que fue un precursor en desarrollar el tema turístico desde la gastronomía: “El turismo derrama. El comercio que le va bien con el turismo gasta. Te llega, aunque no te vaya un turista a comprar. Al principio, tuve que convencer que el turismo era positivo para toda la gastronomía, no solo para los hoteles. Yo voy a comprar si me va bien con el turismo. Siempre marqué los beneficios”. No le tocaron los mejores años como Presidente de la AHRCC, ya que atravesó la crisis de 2001: “Lo sacamos a flote por el equipo de trabajo. Estuvimos a la altura de la situación y eso no es tan fácil, hay que darle pelea a la crisis y estar unidos, aunque no todos pensemos igual…”.
La coyuntura
Sobre la situación actual, dijo: “Pase varias crisis, pero ninguna como esta. No creo que nos recuperemos tan fácilmente. Nos va a dejar mal no solo anímica y económicamente, sino que nos va a costar la recuperación, el país está peor económicamente, cuando la base la tenés mal es difícil que el resto ande bien. Vamos a tener que agudizar el ingenio en hotelería y gastronomía, para salvar a las empresas. Tenemos que estar todos unidos, dejar los egos de lado, y tirar por las instituciones, estar cerca de los asociados, porque nos va a constar recuperarnos. Es lo que veo”.
Antes de finalizar el vivo, envió un cálido saludo al Comité de la Federación y de la AHRCC: “Se tienen que apoyar en la familia, en los amigos, para salir de la situación. Espero que pronto nos podamos reunir. Las Reuniones de Consejo Directivo -se realizan tres al año- es lo más lindo que tiene FEHGRA, es ver cómo esta el país en todas sus dimensiones. A pesar de no pensar igual, nos respetamos. Fuerza para todos”.
Tienen acceso a los Vivos los seguidores de Instagram de la cuenta de FEHGRA: https://www.instagram.com/fehgra_ok/ Se llevan a cabo todos los lunes a las 18 hs.