Después de 35 años de operación, y gracias a un trabajo en conjunto entre el Ministerio de Transporte de la Nación, Intercargo, la Fuerza Aérea Argentina, el gobierno de Tucumán, la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA) y Aeropuertos Argentina 2000, en septiembre comenzará a remodelarse integralmente la torre de control del Aeropuerto Benjamín Matienzo, de la Ciudad de Tucumán. Las obras previstas no interrumpirán el normal funcionamiento de este aeropuerto debido a la llegada de una torre desplazable provista por la Fuerza Aérea Argentina (FAA).

Dicha remodelación se enmarca dentro del Plan de Inversiones y Servicios 2020-2024 de EANA, que asegura el mejoramiento de las condiciones edilicias de las torres de control y tiene como objetivos principales realizar mejoras en las instalaciones de los puestos de trabajos de la cabina, la incorporación de una sala de descanso y el mejoramiento de las áreas comunes.

“Esta es una de las 223 intervenciones que tenemos proyectadas para prácticamente todos los aeropuertos nacionales durante los próximos 3 años y medio. Obras necesarias que forman parte de un plan de inversión con el que vamos a llevar nueva tecnología y mejor infraestructura a todas las provincias. Y lo hacemos porque la Argentina merece un sistema de transporte de calidad que le permita a cada ciudadano viajar sabiendo que se está velando tanto por su seguridad como por generar, cada día más oportunidades de desarrollo”, expresó el ministro de Transporte nacional Mario Meoni. Y agregó: “Ese es el desafío que tenemos en lo que viene y es la manera de poner a la Argentina de pie en la post pandemia”.

Debido a los retrasos ligados a la pandemia COVID-19 y las restricciones asociadas, los trabajos en la torre de control, que iban a comenzar en el primer semestre del año, fueron reprogramados para la segunda mitad y tendrán lugar en septiembre. Las obras previstas se harán sin alterar la continuidad de las operaciones del aeropuerto, de importancia estratégica para la región y que es también alternativa en las rutas regionales como es el caso de Lima.

A tal fin, EANA llegó a un acuerdo con la Fuerza Aérea Argentina (FAA) para la provisión y utilización de una torre desplazable, de propiedad de la FAA, a fin de seguir prestando servicio mientras se realicen los trabajos en la cabina de control. Dicha torre móvil llegó el jueves 20 de agosto al aeropuerto a bordo de un avión C-130 Hércules.

Los controladores de tránsito aéreo recibirán la capacitación específica para el trabajo en dicha instalación móvil a partir del lunes 7 de septiembre y por un lapso de tres semanas, durante las cuales tendrán lugar las obras proyectadas para la cabina y la sala técnica de la torre antigua. Con una dotación de 14 personas, dicha torre de control llegó a atender 100.000 movimientos de aeronaves al año.

En el contexto actual y considerando las restricciones de circulación que afectan hoy en día la circulación en el área metropolitana de Buenos Aires por motivos epidemiológicos, se busca asegurar la operatividad de los diferentes aeropuertos de las regiones menos comprometidas, en provincias con menos limitaciones, que podrán servir de centralizadores para distribuir y abastecer los vuelos al resto del país y hacia otras regiones.

“Operar desde una torre móvil es un hito en la historia de los servicios de navegación aérea, ya que nos permite mantener sin afectar las operaciones en el aeropuerto bajo los estándares de seguridad operacional,” señaló al respecto Gabriela Logatto, presidenta y gerenta General de EANA. “En este caso, lo importante es prestar el servicio 24hs en el aeropuerto como el de Tucumán, que es estratégico no sólo para la atención de vuelos sanitarios sino también para logística de vuelos cargueros, ya que es un nodo logístico internacional muy importante para el país. Agradecemos la coordinación y el trabajo en equipo de los diferentes organismos nacionales como la provincia de Tucumán”.

EL AEROPUERTO DE TUCUMÁN

El Aeropuerto Benjamín Matienzo es el único preparado en la región para recibir vuelos de aeronaves de gran porte, en especial las que realizan servicios de carga y cuenta con la segunda pista más larga de la Argentina. Reviste gran importancia a nivel nacional gracias a los vuelos cargueros a Santiago de Chile y Miami, que llevan la producción tucumana de arándanos y otras frutas finas, así como de otros productos de exportación, inclusive maquinarias de la producción local de automotores. Para cuando el control aéreo regrese a la torre fija, ya renovada, comenzará la temporada de exportación de arándanos.

La torre de control de Tucumán, inaugurada en 1986, está en mal estado general y carece de escalera de emergencia y sala de descanso. Será remodelada en forma integral, con una cabina de control y espacios comunes renovados. Contará con una sala de descanso para los controladores, una nueva instalación eléctrica y una escalera de escape exterior.

También serán renovadas totalmente sus instalaciones sanitarias y se impermeabilizará el techo de la cabina de control, la cual contará con nuevos equipos de aire acondicionado, al igual que la sala de equipos técnicos. De igual modo se renovará el entrepiso y la circulación vertical, así como los mobiliarios fijos.