Finalizada la primera quincena de la temporada de verano, los prestadores turísticos de la provincia de Entre Ríos hicieron un balance de lo que va del verano, distinto a todo y en convivencia con un virus que tiene en vilo al mundo: «vemos con mucha preocupación la caída de la actividad en Entre Ríos y el intento de la Secretaría de Turismo de disimular ese fracaso con números incorrectos. El sector privado entiende que esta situación es producto exclusivo de la indiferencia e inacción de las autoridades, las cuales, pese a los reiterados pedidos, se negaron a hacer lo que se debía» -expresó a través de un comunicado la Cámara Entrerriana de Turismo.
La entidad que nuclea al sector privado de la provincia sostiene que «el turismo entrerriano se encuentra diezmado por la falta de respuestas y sostenimiento del Estado provincial, el cual, a través de su Secretaría de Turismo, dependiente del Ministerio de la Producción, se mantuvo ausente a lo largo de toda la crisis económica – sanitaria que sufrimos».
Lo mismo que ocurre en otros destinos, y por ejemplo en la Ciudad de Buenos Aires en la cual el setenta por ciento de los hoteles está cerrado; en ese sentido, explican que «un significativo número de prestadores decidieron no abrir sus puertas en esta temporada en territorio entrerriano, mientras que otros cerraron definitivamente».
Al mismo tiempo, por cuestiones de seguridad sanitaria, gran parte de la hotelería debió aplicar protocolos que le redujeron su oferta al cincuenta por ciento. En ese escenario, dicen que «es importante aclarar que los niveles de ocupación informados por la Secretaría de Turismo se confeccionaron tomando la actual capacidad, mostrando una situación que nada tiene que ver con la realidad que atraviesa el sector esta temporada, luego de un traumático año».
«Para evaluar la situación que atraviesa hoy el sector basta comparar los 175 mil turistas que llegaron esta quincena a Entre Ríos, con los 425 mil que hicieron lo propio en el mismo período del año pasado, cuando la ocupación rondó el 85 %.
De este modo, en números generales, los niveles de ocupación real de esta quincena no superaron el 35 % mientras que, solo en casos excepcionales, alcanzaron el 40 %, un nivel de ocupación que compromete nuevamente al sector con pérdidas de competitividad, menos generación de empleo y, sobre todo, empuja un poco más hacia la quiebra a los complejos que aún sobreviven».
Por último expresan que «siendo el turismo el sector que mayor cantidad de puestos de trabajo directos e indirectos genera, y que su colapso ha destruido innumerables empresas y miles de personas perdieron sus empleos, desde la Cámara Entrerriana de Turismo sostenemos que es esencial y urgente que el gobierno se avenga a actuar de acuerdo a las exigencias del caso, y que se planifiquen estrategias que revivan el turismo a corto y mediano plazo» -concluye.
