El Gobierno español se prepara para reabrir sus fronteras al turismo europeo a partir del próximo lunes 21 de junio sin imponer restricciones como la realización de pruebas diagnósticas en origen o a su llegada, por considerar que no garantizaría que se evite una nueva ola de coronavirus.
El Gobierno de España se prepara para reabrir sus fronteras al turismo europeo a partir del próximo lunes 21 de junio sin imponer restricciones como la realización de pruebas diagnósticas en origen o a su llegada, por considerar que sería «inviable» y no garantizaría que se evite una nueva ola de coronavirus.
«No podemos imponer una medida que no se impone en otro país europeo», aseguró hoy Fernando Simón, el principal asesor del Gobierno español en la lucha contra el coronavirus al referirse a la posibilidad de realizar test diagnósticos a los turistas que comenzarán a llegar al país.
Según el experto «en un país que recibe muchos turistas como España realizar pruebas diagnósticas a la llegada es inviable por los tiempos y recursos y períodos de espera. Y, además, por que no garantiza que uno o dos días después haya casos entre los que dieron negativo».
Lo mismo ocurre si un país es un gran emisor de turistas, explicó ante la prensa Simón.
A la cola en la reapertura al turismo entre los países de la Unión Europea (UE), que levantaron sus restricciones a los visitantes del bloque común y asociados de forma mayoritaria el pasado 15 de junio, España volverá a recibir turistas europeos el 21 de junio, cuando se levante el estado de alarma impuesto a la población por primera vez a mediados de marzo para controlar el brote de coronavirus por medio de un duro confinamiento.
Desde ayer, no obstante, está en marcha un proyecto piloto de «corredor turístico» entre las islas Baleares y varias ciudades alemanas, en las que la incidencia de la Covid-19 es muy baja.
Las medidas implementadas se limitan a que el turista debe llenar un formulario de salud pública que les proporcionarán las aerolíneas para facilitar su localización y monitoreo a distancia, en caso de ser necesario contactar a la persona si se detecta un brote de coronavirus, mientras personal de Sanidad Exterior realiza controles a la llegada, como la toma de temperatura.
En el caso del proyecto piloto, para minimizar los riesgos, se establece que tanto el lugar de origen como el destino turístico tengan igual tasa de infección por Covid-19, a razón de nueve personas por cada 100.000 habitantes durante siete días consecutivos.
Cuando las fronteras se reabran totalmente al resto de la UE- la frontera con Portugal permanecerá cerrada hasta el 1 de julio-, ya no habrá este tipo de limitaciones específicas, aunque las autoridades consideran que la situación epidemiológica del país de origen debe ser similar o mejor que la de España.
Tampoco se tendrá que pasar por una cuarentena a la llegada, una medida que desincentiva el turismo, si bien también se sopesa imponerla para los británicos por reciprocidad, como hace actualmente Francia.
Al igual que el resto de países europeos, los expertos de España trabajan con la hipótesis de que puede haber una «segunda ola de coronavirus en el otoño (primavera de Argentina), mientras mantiene bajo control los pequeños «rebrotes» detectados de forma precoz en las últimas semanas.
La llegada de turistas es vital para la recuperación de la economía de España, la más dependiente de Europa de este sector, que aporta cerca del 15% del PBI nacional, y cuya recuperación será lenta, según las previsiones.
Esta semana, el Gobierno presentará un plan concreto de impulso al turismo, que el presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, adelantó que estará centrado en fomentar el turismo seguro y sustentable.
Por noveno día consecutivo España no registró fallecidos por coronavirus, lo que mantiene la cifra total de víctimas fatales en 27.136, tras la muerte de 25 personas en los últimos 7 días, según datos del Ministerio de Sanidad.
En cuanto a los contagios, España registró 76 contagios en las últimas 24 horas, casi el doble que la jornada anterior, y suma 244.328 casos de Covid-19 desde que irrumpió la pandemia.
Fuente: Télam