Israel reportó su mayor cifra de contagios desde marzo y aprobó nuevas restricciones. Ante el aumento de casos, las autoridades solicitaron a los hospitales que se preparen para recibir más pacientes, mientras que los centros de salud advirtieron que no cuentan con el personal suficiente para hacer frente a un nuevo brote con hospitalizaciones masivas.
Israel dio a conocer este martes su cifra más alta de contagios de coronavirus desde el 25 de marzo, tras detectar 730 nuevos positivos, y el Parlamento (Kneset) aprobó nuevas restricciones en los aeropuertos y los vuelos para intentar contener esta ola de contagios, asociada a la variante Delta.
Si bien el número de nuevos portadores del virus es alto, el parámetro que el Gobierno considera el más crucial para monitorear, los casos graves, se mantuvo relativamente estable en 45, 10 de ellos con respirador, informó The Times of Israel y reprodujo Télam.
En tanto, el número de muertos se elevó a 6.439 en la última jornada, uno más que este lunes, después de casi dos semanas sin víctimas mortales.
Los expertos podrían recomendar volver a una versión «suavizada» del sistema Green Pass, en la que para asistir a grandes eventos como bodas o espectáculos culturales y deportivos, las personas no vacunadas se realicen un test en la entrada, infirmó el Canal 12 de Televisión.
Recomendarían el sistema Green Pass: para asistir a eventos las personas no vacunadas podrían ser testeadas en la entrada.
Mientras tanto, la Knesset aprobó regulaciones que otorgan al Gobierno poderes ampliados para hacer frente a la pandemia a través de restricciones en el aeropuerto y los vuelos. La medida estará vigente hasta el 26 de este mes.
La decisión se concreta después de que el Gobierno fuera criticado por su manejo de las pruebas en el aeropuerto durante el mes pasado, cuando se le permitió a miles de pasajeros ingresar al país sin ser examinados.
Las regulaciones estipulan que un pasajero que salga, que sea ciudadano o residente mayor de 16 años, debe recibir un permiso anticipado para viajar a un país prohibido y presentar su aprobación antes de abordar el avión, ya que las aerolíneas no pueden permitir que los pasajeros viajen a países prohibidos sin esta aprobación.
La Kneset también aprobó que los ciudadanos sean multados por violar esta orden. La multa actual asciende a unos 1.500 dólares, informó la agencia de noticias Sputnik.
Cabe destacar que los países prohibidos en estos momentos son Uzbekistán, Bielorrusia, Brasil, Sudáfrica, India, México y Rusia.
Foto: Télam