El ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, y el gobernador de la provincia de Mendoza, Rodolfo Suárez, firmaron hoy un convenio para realizar obras en varias localidades turísticas.
El ministro Lammens señaló que «la provincia de Mendoza tiene un enorme potencial, tenemos que trabajar para promocionarla a nivel nacional e internacional. El turismo post Covid-19 mostrará cambios de hábitos en los turistas quienes priorizaran los destinos y actividades que se desarrollen en espacios abiertos y en contacto con la naturaleza, y Mendoza en este sentido tiene todo para ofrecer”.
Suárez destacó que los proyectos presentados para el programa «50 destinos» se caracterizan por estar pensados para el turismo que viene, ya que se desarrollan en espacios abiertos. Además destacó que «la provincia tiene muchos proyectos para seguir trabajando».
De la firma del convenio, que se realizó virtualmente, también participaron la ministra de Cultura y Turismo de Mendoza, Mariana Juri, y autoridades nacionales y provinciales.
Las obras incluyen la puesta en valor cultural y patrimonial del Cerro de la Gloria, con una impronta de espectáculo de luz y sonido; también se potenciará el valor patrimonial del camino vial andino Qhapaq Ñan, en Ranchillos y en Potrerillos se dotará de la infraestructura básica a la zona del Perilago Dique Potrerillos para mejorar la experiencia de los visitantes.
En San Rafael se mejorará de la infraestructura del Cañón del Atuel; en General Alvear el objetivo es potenciar el turismo gastronómico dentro de la red de mercados que se está desarrollando; y a su vez, se busca impulsar los desarrollos de servicios de alta montaña y su infraestructura en Aconcagua y Tupungato.
El Plan 50 Destinos, que se enmarca en el Plan de Auxilio, Capacitación e Infraestructura para el Turismo (PACIT), impulsa más de cincuenta obras de infraestructura turística en toda la Argentina, con $1200 millones originarios del Impuesto PAIS que apuntarán a dinamizar la actividad, con mejoras que fortalezcan la oferta turística y fomenten la competitividad sectorial.
Cada una de las provincias argentinas recibirá un aporte de entre 50 y 60 millones de pesos para obras turísticas, con el objetivo de ayudar a diversificar la oferta, potenciar sus productos existentes, presentar circuitos integradores que incentiven los desplazamientos entre destinos cercanos, y promover la generación de actividades turísticas complementarias.