El resultado se obtiene a través de un informe que elabora anualmente el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) con datos estadísticos de diversos temas que no figuran en los Anuarios. En la Argentina hay reconocidas 110 Indicaciones Geográficas (IG) y dos Denominaciones de Origen Controladas (DOC). El 54% de esta producción se destina actualmente al mercado exportador.
La comercialización de vinos con atributos diferenciales va en aumento en todo el mundo, atendiendo una demanda cada vez más exigente. Los vinos que hacen referencia a la zona de la cual provienen son muy apreciados por un consumidor ávido de conocer el origen del producto que consume, las condiciones en las cuales éste se produce y el aspecto humano que origina el producto final.
En este sentido, las ventas de vinos con denominación de origen de Argentina van en aumento en los últimos años tanto en el mercado interno como en el externo. Son una de las claves para el crecimiento del enoturismo y agregado de valor al producto final, lo que ayuda a mejorar la rentabilidad de la empresa.
En el presente informe se analiza la evolución de la comercialización de vinos con IG y DOC en los últimos 8 años, cuáles son las denominaciones de origen más utilizadas en el mercado interno y externo, como así también los destinos más frecuentes de las exportaciones de este tipo de vino.
La comercialización de vinos con Indicación Geográfica (IG) y Denominación de Origen Controlada (DOC) se duplicó en los últimos cinco años, al pasar de 1,6% del total al 3,6%, de los cuales el 54% se exporta y 46% se va al mercado interno, según el informe del INV.
Las exportaciones de vino con IG/DOC en 2022 alcanzaron un volumen de 21,1 millones de litros por un valor FOB de US$ 101,5 millones y un precio medio de US$ 4,8 por litro, 55% por encima de la media del total de los vinos.
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