El propósito es mejorar la competitividad del sector en el mercado externo, potenciando el valor agregado de la industria. Para ello el Ministerio de Desarrollo Productivo de Argentina trabaja con el sector público y privado para aportar diversas herramientas y lograrlo.
Organizado por el Ministerio de Desarrollo Productivo de Argentina, el presidente del INV, Contador Martín Hinojosa, formó parte del Segundo Encuentro de la “Productividad para la Cadena de Valor Vitivinícola”, en donde se presentó el Plan 1000 que tiene entre los objetivos generales aumentar la productividad y competitividad de empresas vitivinícolas exportadoras o con potencial exportador como así también, lograr que se exporte más valor agregado junto a un mayor volumen en dólares.
Este plan nacional tiene como objetivos: alcanzar los 1000 millones de dólares anuales de exportaciones de vino fraccionado y a granel al 2023, incrementar el número de MiPyMes exportadoras del sector y los volúmenes de las que ya exportan, lograr inclusión financiera de las empresas y acceso a herramientas puntuales, generar mayores capacidades en las MiPyMes del sector, diversificar mercados, entre otros.
En ese sentido el Ministerio está trabajando bajo algunos ejes estratégicos como financiamiento e inclusión financiera, medidas para fortalecer la competitividad, articulación entre actores de la cadena, acceso a instrumentos y al mercado externo. Así como también está trabajando con diversos beneficios para la mejora de la competitividad de la industria e instrumentos para el mercado interno y externo.
El presidente del INV, agradeció la participación y mencionó que desde el Instituto se viene trabajando en conjunto con entidades privadas y públicas de manera diaria para aportar y mejorar la competitividad del sector vitivinícola y la mejora en las exportaciones.
Hinojosa hizo hincapié en algunas medidas que se tomaron recientemente como fue la baja en las retenciones. “Luego de esta medida 4 de cada 3 bodegas exportadoras se vieron beneficiadas y dejaron de pagar. Esto es un reclamo que venía haciendo el sector desde hacía 10 años. Este es un pequeño ejemplo de cómo está trabajando todo el sector en conjunto para fortalecer las ventas en el mercado externo”, remarcó.
“Algo que nos enseñó la pandemia, es que tanto en el mercado interno como externo regula la rentabilidad, los stocks. Cuando se vende mucho se beneficia toda la cadena vitivinícola. Necesitamos vender para lograr ese equilibrio. Por ello este Plan impulsado por el Ministerio es una herramienta que ayudará a toda la industria y a todos los eslabones que la componen, desde productores, bodegas, industriales, proveedores, etc.”, remarcó el titular del INV y agregó que “obviamente falta mucho por hacer y se necesita un trabajo integral, por ello es que todas las herramientas del Plan 1000 potenciarán los envíos en el mercado externo y aportará a todo el sector vitivinícola”.
“Tenemos un trabajo por delante, donde estemos todos sentados y haya una articulación de toda la cadena para fortalecer la competitividad con financiamiento, inclusión financiera y acceso a diversos instrumentos. Cuenten con el INV para cumplir con estos objetivos”-concluyó.