La Intendencia del área protegida nacional informó sobre una serie de focos de incendio que serían producidos por bandas de cuatreros que prenden fuego para borrar las huellas de su paso con rodeos irregulares.

En el actual contexto de sequía generalizada en la región, este tipo de práctica genera un grave peligro para la biodiversidad de la zona, como así también para los sectores productivos aledaños al Parque Nacional Rio Pilcomayo, dada la gran intensidad que en la temporada estival alcanzan los frentes de fuego.

En el operativo intervienen brigadistas del Parque Nacional con camiones cisterna, maquinaria rural y herramientas de mano; para generar cortafuegos y zonas libres de vegetación que impidan el avance del fuego hacia sectores de pastizales, que una vez que se incendian son difíciles de controlar dadas las condiciones climatológicas imperantes.

Según los registros locales, desde principios del año 2022 ya se registraron unos 17.000 focos de incendios en la Provincia de Formosa, con aproximadamente 350.000 hectáreas impactadas. Esta situación impulsó la declaración de estado de Emergencia Agropecuaria en el sector ganadero y apícola hasta el 30 de junio del 2023 por parte del Gobierno provincial, para los establecimientos rurales afectados por déficit de precipitaciones, altas temperaturas y quema de pastizales.

Este Parque Nacional resguarda una gran diversidad de ambientes acuáticos, terrestres e inundables que van desde lagunas y esteros, pastizales con palmeras, islas de bosques y selvas en galería que acompañan las márgenes de ríos.

Esta característica convierte al área en un lugar de importancia para la conservación de la biodiversidad de los ambientes húmedos chaqueños de nuestro país. Las isletas de bosques son tupidas, con árboles de madera dura como el lapacho, el quebracho colorado chaqueño, el algarrobo y el guayacán junto a numerosos arbustos, enredaderas, epífitas y un suelo tapizado de caraguataes.