El lugar ubicado en Concarán no cumple las normas legales poniendo en riesgo la vida de los visitantes, quienes los reciben prestan servicio en forma irregular, no contando con: habilitaciones, guías, servicios de urgencias médicas y/o seguros de ningún tipo.

En un operativo de control conjunto entre el Área de Fiscalización de la Secretaría de Turismo, la Policía Minera de la Dirección Provincial de Minería, dependiente de la secretaría de Medio Ambiente, la Policía Rural, en presencia de un escribano; se recorrió el lugar determinando que las personas que concurren están poniendo en riesgo sus vidas. La inspección se realizó a fin de verificar el estado de las superficies externas, espacios subterráneos, estado del campamento abandonado, edificaciones y caminos internos, además del cumplimiento de lo establecido en la Ley de Turismo Activo N° IX-1065-2021.

A partir de la fiscalización en el lugar donde reciben turistas a los que se les cobra una entrada, se determinó que no cuentan con:

Ningún tipo de título ni autorización de los titulares del inmueble para realizar las actividades propuestas.

Guías habilitados.

Servicios de urgencias médicas.

Seguro de ningún tipo.

Matafuegos.

Señalética.

Baños públicos.

Servicios básicos en general

Información turística acorde.

Casco, botas y linternas homologados y certificadas por el Colegio de Ingenieros y Seguridad e Higiene.

Se verificó que los espacios se encuentran en muy malas condiciones, las edificaciones por su antigüedad y abandono presentan un peligro permanente de derrumbe (techos y paredes), poniendo en riesgo la vida de visitantes y personal del lugar. La maquinaria en desuso abandonada entre la maleza hace propicio el lugar para la presencia de animales salvajes.

Tras un recorrido por la antigua planta de tratamiento y sectores de concentración mineral, el personal especializado informó que se observó que los techos y edificaciones se encuentran en mal estado, como la maquinaria abandonada; un antiguo molino, tolvas, mesa de clasificación y cañerías, entre otras.

El nivel 0 de la mina, donde se desarrolla la actividad turística, la galería de ingreso posee una altura de 1,80 m por 2,50 de ancho, con un nivel de agua de 30 cms producto de filtraciones provenientes del exterior de la mina. El camino de ingreso presenta nulo mantenimiento, en tanto que los caminos internos no son aptos para transitarlos.

Otro de los factores que indican peligro para la circulación de quienes ingresan al predio, son las escombreras ubicadas en la margen del arroyo Las Cañas y en el sector de la planta de tratamiento. Su altitud y el hecho de caminar por encima de ellas es riesgoso, pudiendo ocasionar graves accidentes. La falta de carteles indicadores en espacios que revisten peligro para las personas es nula, tanto en el interior de la mina como también en el complejo minero. El nivel de agua en el túnel, sumado a la falta de luz hace del recorrido una actividad con mucho peligro para la integridad física de las personas.