El ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, recibió al ministro de Cultura y Turismo de Jujuy, Federico Posadas, para analizar los impactos en la provincia de la temporada de verano récord.

Gracias al impulso de PreViaje, los destinos del norte argentino están disfrutando un verano histórico”, aseguró el ministro Lammens tras el encuentro. Y agregó que “El éxito de esta temporada es un ejemplo de lo que podemos lograr como país cuando trabajamos con un objetivo común, más allá de nuestras diferencias”. Asimismo confirmó que visitará Jujuy el jueves de la próxima semana, oportunidad en la que dará a conocer sobre un nuevo aporte de 100 millones de pesos para obras turísticas en la provincia incluidas en el Plan 50 Destinos.

En el mismo sentido, el ministro Posadas declaró que “Disfrutamos el mejor enero en la historia del turismo de Jujuy, con muy buenas perspectivas para febrero por el carnaval”. Y finalizó: “PreViaje ha sido muy bueno para la provincia, para la región y para toda la Argentina”.

Posadas refirió que durante el encuentro evaluaron los resultados que logró la provincia con la aplicación del programa PreViaje desde junio del año pasado, lapso en el cual Jujuy logró un récord de turistas en enero último y el «excelente» segundo semestre 2021.

En el mismo tenor, el funcionario jujeño hizo hincapié en que se le planteó a Lammens «la necesidad de aumentar las frecuencias aéreas hacia y desde Jujuy a diferentes destinos turísticos, más allá de las confirmadas para abril próximo entre Jujuy y Buenos Aires y Córdoba».

Sostuvo que «en vistas de los proyectos que tiene la provincia para el corriente año, quedó en firme la decisión de seguir trabajando juntos a pesar de las diferencias del color político, evitando las grietas y pensando en seguir haciendo crecer el turismo en Jujuy, en particular, y en el país en general», concluyó.

De acuerdo a los datos registrados por el Observatorio Turístico del Ministerio de Cultura y Turismo de Jujuy, la ocupación promedio provincial durante enero fue del 79,6%, el más alto en la historia jujeña, con 93% de ocupación en la región de la Quebrada. El impacto económico superó los $2400 millones.