Si bien la temporada de pesca deportiva en la Zona Andina arrancó en noviembre, en contexto de pandemia, se registró un alto nivel de demanda de permisos y visitantes en costas de ríos y lagos, llegando al mismo nivel de años anteriores.
Durante la cuarentena los pescadores prepararon sus equipos y apenas tuvieron la oportunidad salieron al aire libre a desatar su pasión por las truchas.
El gerente de la Mesa Directiva Honoraria de Pesca Deportiva de Bariloche, Martín Freedman, informó que al igual que en la temporada anterior se vendieron 15.000 permisos, sin contar los extranjeros que no están ingresando al país, que año a año demandan alrededor de 800 pases en Río Negro.
“Con tantas actividades paralizadas, la pesca fue un imán para miles de personas de Bariloche y la región. Apenas se abrió la temporada en noviembre salieron desesperados. La venta de pases se anticipó y se concentró mayormente en noviembre, es la única diferencia con el año anterior”, explicó Freedman.
Jurisdicciones
La Mesa de Pesca está constituida por el representante provincial Martín Freedman, referentes del Club de Pesca y Caza, la Asociación de Guías Profesionales de Pesca, la Universidad Nacional del Comahue, y en algunos casos suele sumarse Parques Nacionales y el EMPROTUR para temas específicos.
La provincia limita en jurisdicciones de pesca deportiva con Parques Nacionales y también con Neuquén, por lo que toda la reglamentación debe estar bien coordinada, tanto para cuidar el ambiente y el recurso como para prestar servicio a los pescadores.
Freedman explicó que “en todo el ámbito provincial cada lugar de pesca tiene requerimientos específicos y se complementan con Parques y Neuquén, por ejemplo sectores exclusivos de pesca con mosca o de spinning, si se puede sacrificar o no la trucha, y otras”.
Toda la información se puede encontrar en el sitio web www.mesapescaandina.org y los permisos pueden adquirirse en decenas de comercios del rubro, estaciones de servicio, campings, etc., de Bariloche y Dina Huapi.
Permisos
Los permisos de pesca son sin cargo para menores, jubilados y pensionados, y los pagos comienzan con el diario, de $275; semanal $550; temporada 1.100, y adicional trolling (para pesca embarcada y arrastre de señuelo) de $2.200.
El permiso es anual, aunque mayormente se puede pescar siete meses en toda la Patagonia, con temporadas que se extienden hasta abril o mayo según el sector.
En la Zona Andina además es posible pescar todo el año en el lago Alicurá y lago Moreno (en el ejido de Bariloche).
Guardapescas
Río Negro cuenta con un cuerpo de Guardapescas que actúa en toda la Zona Andina en la asistencia al pescador y el control del permiso, aspectos reglamentarios y vigilancia contra la pesca clandestina.
Amílcar Koprio, uno de los guardapescas históricos de la provincia, señaló que esta temporada atípica no aumentó el número de infractores, pero sí la concurrencia masiva a áreas exclusivas de mosca apenas se abrió la temporada.
“Fue cuestión de entender a los pescadores después de un año de encierro, y cuando no estaba permitido ir a Neuquén (se abrió a la pesca recién el 4 de diciembre), y por las buenas disuadirlos y recomendarles lugares indicados para el momento y la modalidad”, señaló Koprio.
El guardapesca dijo que a simple vista “este año pareció haber más pescadores que en temporadas anteriores” y que encontró a “personas que hacía cinco años que no pescaban, en especial muchos jóvenes, que prepararon y compraron en los meses previos sus equipos y salieron al no poder hacer otras actividades”.
Agregó que la falta de presión de pesca, la menor movilidad de las personas y también la dificultad extra planteada para la pesca clandestina, “este año hubo muy buenas capturas, tanto en cantidad como en tamaños, y se vieron además muchos alevinos, mostrando que la reproducción funcionó mejor”.